EL NUEVO DIARIO, LOS ÁNGELES — El año pasado, Shohei Ohtani se presentó en la postemporada con un jonrón que empató el juego en su segundo turno al bate en su primer partido de playoffs en Grandes Ligas.

Esta vez, no hizo esperar tanto a los aficionados en el Dodger Stadium.

Ohtani jaló una recta de tres dígitos del abridor de los Rojos, Hunter Greene, enviándola al jardín derecho con un láser para iniciar el Juego 1 de la Serie del Comodín de la Liga Nacional la noche del martes.

El bambinazo salió disparado del bate a 117.7 mph, el cuarto cuadrangular más fuerte conectado en postemporada desde que Statcast comenzó a registrar datos en 2015. Ohtani estuvo cerca de superarse a sí mismo en el tercer puesto de esa lista, ya que en el Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional del año pasado conectó uno de 117.8 mph, que además había sido el último jonrón abriendo el juego para los Dodgers en postemporada antes del del martes.

El envío de Greene, a 100.4 mph, fue también el pitcheo más rápido del que Ohtani ha sacado la pelota en su carrera (el anterior fue de 100.1 mph, ante el dominicano Jhoan Durán el 22 de julio de 2025, y Paul Skenes el 5 de junio de 2024). Ningún jugador de las Mayores ha conectado un vuelacercas más duro contra una recta de más de 100 mph que el de Ohtani.

Tan sólo dos días antes, Ohtani rompió su propio récord de jonrones en una temporada con la franquicia al conectar su 55to bambinazo del año en el Juego 162 de la campaña regular. A sólo dos años de haber llegado a Los Ángeles, la superestrella de dos vías ya está dejando huella en los libros de historia de una de las franquicias más emblemáticas del béisbol.

Ohtani ha conectado cuatro vuelacercas en postemporada. El primero también fue en el Dodger Stadium, cuando le devolvió la vida a los Dodgers en el Juego 1 de la cerrada Serie Divisional del año pasado contra los Padres, al sacarle la bola a Dylan Cease.

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