EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO. – A sus 22 años, Fran Ortuño ha logrado lo que para muchos representa el sueño de toda una vida: ser millonario, dirigir más de siete empresas y, al mismo tiempo, ejercer como futbolista profesional. Su historia, sin embargo, no comenzó en las canchas, sino en el mundo de los negocios.

Durante su participación en el programa Curvas Deportivas, conducido por Karen Ozuna, Susy Jiménez y Mariela Guerrero, Ortuño compartió cómo incursionó en el emprendimiento desde muy joven, fundando su primera empresa a los 16 años, la cual vendió apenas dos años después.

“A los 15 salí de casa por tema del fútbol, y tenía un buen amigo que era un buen diseñador gráfico, y aproveché ese momento. Como conocía a bastantes futbolistas y era un momento de redes sociales que estaba en crecimiento, nosotros les hacíamos las historias para Instagram y los vídeos”, explicó.

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Aunque comenzó a practicar fútbol desde los cinco años, confesó que hoy en día lo considera un pasatiempo. La verdadera fuente de su fortuna ha sido el emprendimiento. Según detalló, ha ganado menos de dos millones de euros como jugador, mientras que sus negocios le han generado más de 68 millones de euros.

Durante su visita a República Dominicana, Ortuño informó que está explorando oportunidades tanto en el ámbito deportivo como en el inmobiliario. En cuanto al primero, su interés se centra en captar nuevos talentos para su agencia de representación de jugadores.

“Tienen cierto potencial para llevar jugadores a Europa”, aseguró al referirse a los atletas dominicanos.

También destacó el atractivo del país como destino de inversión. Ya ha realizado adquisiciones inmobiliarias en Punta Cana, Samaná y La Romana, y considera que el país cuenta con condiciones propicias para el crecimiento económico.

“República Dominicana tiene cierto potencial que a nivel de fuera en Europa vemos que lo tiene”, señaló.

Consultado sobre qué consejo daría a quienes aspiran a alcanzar el éxito a temprana edad, fue enfático: “Disfruten del proceso, yo creo que no tienes que tener miedo. En el mundo de inversiones, quién tiene miedo no creo que gane”, enfatizó.

Con una visión global, enfoque estratégico y mentalidad de riesgo calculado, Fran Ortuño no solo redefine el perfil del joven empresario moderno, sino que se perfila como un puente entre el talento dominicano y los negocios internacionales

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