FILADELFIA — Fue exactamente hace dos semanas, el miércoles por la noche, que los Filis dejaron Nueva York después de sufrir una barrida que potencialmente podría cambiar la temporada a manos de los Mets.

La ventaja de los Filis en la cima de la División Este de la Liga Nacional se había reducido a cuatro juegos tras la paliza de tres juegos. Parecía que la carrera por el título divisional había comenzado de nuevo.

Sin embargo, si avanzamos rápidamente hasta este miércoles, resulta casi difícil de creer.

Los Filis vencieron a los Mets por tercer partido consecutivo, 11-3, en el Citizens Bank Park. Tras ser superados por 17 carreras (25-8) en la barrida de tres juegos en el Citi Field, Filadelfia revirtió la situación al superar a Nueva York por 15 carreras (21-6) en los primeros tres juegos de esta serie de cuatro.

Los Filis mejoraron su marca a 10-3 desde aquella serie para el olvido, mientras que los Mets cayeron a 4-9. La última victoria amplió la ventaja de Filadelfia (86-60) sobre Nueva York (76-70) a 10 juegos, su máximo de la temporada . Es apenas la segunda vez en la historia de la franquicia que los Filis tienen una ventaja de dos dígitos en su división en septiembre (también en 2011, cuando ganaron la División Este de la Liga Nacional por 13 juegos).

A estas alturas, aferrarse al segundo puesto sobre el eventual campeón de la División Oeste de la Liga Nacional probablemente sea una mayor preocupación para los Filis que cualquier cosa relacionada con la División Este de la Liga Nacional. De igual manera, es probable que la atención de los Mets se haya centrado en aferrarse al tercer y último puesto de comodín de la Liga Nacional.

Al igual que el propio equipo, Cristopher Sánchez (13-5) se recuperó con fuerza de su mala actuación en Nueva York, donde permitió seis carreras, su máximo de la temporada, el 25 de agosto . Esta vez, el zurdo se parecía mucho más al candidato al Cy Young de la Liga Nacional que ha sido durante gran parte de la temporada.

Sánchez lanzó seis entradas de una sola carrera en lo que podría haber sido un anticipo de su posible participación en el Juego 1 de la Serie Divisional de la Liga Nacional. Fue una señal alentadora, dado que tuvo una efectividad de 9.82 en sus dos primeras salidas contra los Mets esta temporada, en comparación con una efectividad de 2.29 contra todos los demás equipos.

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