EL NUEVO DIARIO, MADRID.- Un impactante caso sacude el mundo del automovilismo mundial. El español Antolín González, expiloto de F3 de 23 años que en su momento soñaba con alcanzar la Fórmula 1, confesó haber asesinado a su padre con una puñalada en el cuello tras una fuerte discusión familiar, hecho que lo recala en la cárcel desde hace casi cuatro meses.

Según los medios El País y La Sexta, ante el juzgado de Instrucción número dos de Aranda de Duero, Burgos, el excorredor argumentó que su padre lo había amenazado con un machete de entre 10 y 15 centímetros de largo. Luego, se produjo la muerte, tras una disputa. “Forcejeamos y accidentalmente le apuñalé en el cuello”, explayó.

El asesinato se realizó en la empresa familiar de venta de aceitunas y encurtidos. Después del lamentable suceso, González escapó de la escena del crimen y lanzó el cuchillo al río Arandilla, aunque todavía no se ha encontrado.

El homicida luego fue detenido sin oponer resistencia y permanece en prisión provisional en el mientras tanto.

La confesión fue clave, ya que no habían ni cámaras de seguridad ni testigos que hayan podido registrar los hechos. Una vez realizó la revelación, el joven acompañó a la Policía a un sitio cercano al río Bañuelos en el que se deshizo del arma homicida y de una mochila, que había llevado al gimnasio.

González también sostuvo que estaba bajo una importante presión psicológica de su progenitor, quien se había divorciado recientemente de su madre, mujer que lo había denunciado en dos ocasiones por maltrato.

Nacido en 1999, el expiloto prometía mucho. Tanto, que ha sido comparado por momentos con el mismísimo Fernando Alonso.

Después de destacarse en las divisiones inferiores de karting, fue subcampeón de la Fórmula Renault 2.0 Asian Championship 2018. Sin embargo, a partir de allí, su rendimiento fue decayendo año tras año

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